sábado, 24 de agosto de 2019

Tiempo finito

El camino es largo, al menos eso espero, el tuyo digo. Sí, es a ti, ya sé que eres joven, muy joven, mucho más que yo, tan joven como lo era yo en aquel tiempo en el que pensaba que el tiempo no corría, que apenas transcurría, lo hacía despacio entonces, eso pensaba yo. Pues estaba equivocada, ya sé que no te sirve, ni si quiera leerás esto, lo suelto ahora, cuando ya tengo la vivencia, cuando la certeza está conmigo. Nunca es tarde para hacer un cambio de rumbo, pero el tiempo no es el mismo, nunca sabes cuánto te queda así que no lo malgastes, vive, vivir no es solo caminar, también es aprender en el camino, por lo que vives pero también por lo que vivieron antes y cuyos tropiezos son fuente de sabiduría para el que quiera aprender sin magullarse. Sé que no vas a leer esto pero por si acaso lo haces te lo confirmo, la vida pasa tan deprisa que apenas tendrás tiempo para darte cuenta de que está pasando y que tan importante es la meta como el camino. El alcohol no es bueno en exceso, ojalá no hiciera falta sentir lo amargo del vómito ni el martillazo en la cabeza para saberlo, hoy muchos jóvenes están aprendiendo a base de magullarse. Imagen impactante, la madre llorando susurrándole al oído su nombre, el niño duerme la mona inconsciente y ella llora al lado de la camilla de la UVI, esa madrugada ambos aprenderán. Y yo pensaré en ti, y por mi empatía seré capaz de sentir lo que esa mujer, que pide a no se sabe quién que no le pase nada, que no le pase nada, tal vez al dios en el que hace mucho tiempo dejó de creer. Y sentiré el dolor de esa mandíbula rota y la presión del labio ante la gigantesca hinchazón y veré a mi hijo, y pensaré, tal vez rezándole también a ese dios invisible que él no lo viva jamás, que no se meta en una pelea, y que no se llegue a meter nada en el cuerpo que lo pueda dañar tanto como a este pobre. Esta juventud no sabe divertirse, decía en voz alta el vigilante, no saben ni emborracharse, vienen a dormir la mona al hospital, antes te ibas a casa a dormir la mona; claro que ahora hay más cosas que había antes, mezclan sustancias raras con el alcohol y pasa esto. Eso es, pasa el tiempo, lo que te decía. A ti, sí, a mi niño precioso, a ti te lo digo, muerta de sueño, de cansancio o de alteración, montada en el metro, de camino a casa.

jueves, 22 de agosto de 2019

De inmortales gestos y miradas amables.




Tú no eres inmortal, no, nadie lo es, ni si quiera lo son las olas en su llegada constante hasta la orilla infinita. Lo que sí pueden serlo son tus palabras, tus gestos, tus actitudes. Una buena acción puede llegar a inmortalizar tu alma porque alguien recordará el gesto, y ese gesto tendrá consecuencias, tu gesto será germen para otro gesto, y así, gesto tras gesto podremos cambiar el mundo. Una actitud buena ante la vida será un regalo no solo para ti sino también para las personas y las vidas que se crucen en tu camino. Tienes el poder de cambiar el mundo, de apagar fuegos, incluso ese horrible que mina el pulmón amazónico, porque si todos movemos las alas arrastraremos a las nubes hasta ese lugar y todo será posible, hasta que renazcan de sus cenizas los seres inocentes que creyeron en el ser humano. Sin pulmón no podremos respirar, ni los ricos ni los pobres, los de espíritu, los de monedas, los de bienes, los de conocimientos, todos acabaremos ahogados con nuestros pequeños tesoros.

viernes, 2 de agosto de 2019

La reutilización de un folio por el paso del Pi.





    Hoy desdoblé un folio que se tenía en el bolsillo pequeño de mi mochila, iba en busca de un trocito de papel en blanco, un espacio donde hacer bailar el bolígrafo y registrar pensamientos inspirados. Al hacerlo descubrí que era una hoja que había sido utilizada en muchos momentos distintos de mi vida, tal vez tenía una vida de unos meses y había sido utilizado unas cuatro veces distintas, y en cada una de ellas mi vida era sentida de forma diferente. Un día fue contenedora de las explicaciones que le daba a mi hija, para ayudarla con las mates. Era el tema de las áreas de los polígonos. Me pregunto qué área tendrá el mapa de las emociones. Cuando un día eres feliz porque por fin recibes un primer sueldo tras años de sequía y otro tiemblas por los miedos creados, por las anticipaciones, por los anclajes al pasado.
    Hace unos días en un vídeo documental sobre Pina Bausch se recogían sus palabras cuando decía que con sus coreografías intentaba expresar lo que el mundo le pedía y le inspiraba, aquello que veía en él lo expresaba a través de la danza, increíbles creaciones, acción reacción vital. Ella decía que lo hacía de ese modo, maravilloso, porque no tenía las palabras como las poetisas. Hay tantas formas de expresar, de conmocionar, de causar reacción, vibración, movimiento celular psicosomático...
Pero volvamos al folio... Seguro que cuando escribía la lista de la compra, "detergente, desenredante, leche, yogures, salchichas queso, toallitas culete, cervezas...", seguro que en ese momento tenía sentimientos encontrados, los inmortalizaría con la sensación de urgencia, que no se te olvide, pensaría, con lo bien que sienta esa cervecita fría cuando ya estás en casa, tranquila, con el trabajo hecho, con la mirada relajada, y tu familia en buen estado. Sí, ese folio contuvo, contiene tu transcurrir vital.  Hasta una palabra que busqué en un momento de urgencia, cuando explicaba a mi hija inglés, yo que solo sé que no sé nada, y supe así que "hard" significaba difícil. Como difíciles son momentos concretos de miradas perdidas en ventanas que asoman a vacíos existenciales, en las que un edificio blanco se convierte en una espesura negruzca llena de pensamientos que no son más que eso, pensamientos, pero que sin ser físicos llegan a convertirse en muros cegadores que no te dejan ver más allá de los muros de tu castillo. Pero no es un castillo, es una casa pequeña. Pero no son muros, son limitaciones creadas por tus miedos. El área del miedo es como la del rectángulo, lado por lado, daño por dolor; no, el área del miedo es como la del triángulo, dolor por anticipación partido por daño; no, hay que incluir el signo "Pi", el del área del círculo, el 3,14, el "Pi" es el tiempo. Y el tiempo reajusta las fórmulas.
    En fin, gracias al tiempo el área del miedo se modifica. El tiempo nos trae arrugas, pero también nos enseña a reajustar las fórmulas.

Isolina Cerdá

Transitorio



    Todo tiene una razón de ser y cuando te preguntas por qué la vida te cogió de la mano un día y te trajo hasta esta senda vas encontrando respuestas en cada bache, en cada recoveco, en cada soplo de aire en el cuello.
    De pronto un día, en un momento concreto, en un segundo del tiempo que siempre te acompaña, te cruzas con esa mirada que no necesita palabras para compartir contigo, para hacerte partícipe de su camino, para buscar en ti un apoyo en ese momento transitorio, porque pasará, sí, ya verás. Y esas sábanas blancas volverán al recipiente de ropa sucia, al carrito de la colada pendiente de desinfección, te arrancarás ese camisón que cubrió tu cuerpo, y te volverás a vestir tu ropita. Entonces la mirada será otra. "Me voy a casa, gracias, me voy por fin, del brazo de mi marido, con mis hijos acompañando mis pasos heroicos, dejando atrás este mal sueño de cuerpos heridos, de vidas truncadas, de pausas obligatorias..."

Isolina Cerdá

Pos pandemia. Corazón postraumatizado.

      Hoy, ahora, hace un momento, me dio por hacer limpieza del bolso. Mi bolso es una especie de contenedor de vida, también de objetos pu...